8/31/2008

Acerca de la belleza



En estos días en que la mayoría de las jovencitas se desviven por tener el pecho mas abultado(como leí en el blog de la Sra. Yolanda Fernandez), o el caso de Roxana Vargas, donde quien no tienen bracers y la dentadura perfecta, pasa desapercibido, quise hacerme una reflexión acerca de la belleza, no la física pues esa pasa...


Alguna vez escuche la historia de un hombre que se caso con una joven muy hermosa pero al poco tiempo ella tuvo un horrible accidente que le produjo quemaduras de segundo grado en el 85% de su cuerpo...


..y yo me pregunto: ¿Será que por esto debe dejar de amarla?


¿Existe realmente alguien "Feo"?

…cuál es el parámetro para medir la belleza..???

Creo que no existe tal parámetro. Quién parece no ser agradable para algunos, puede ser atractivo para otros, así que cada quien tiene su propio criterio. Cada quien tiene un concepto diferente la belleza… aunque la publicidad nos satura con aquello de los modelos de cuerpos perfectos (y por algunos que se sienten afortunados por algo meramente superficial). Creo firmemente que la belleza de la gente está dentro de ellos y por tanto solo existe la apariencia exterior de ser “feos”.

Pienso que es un regalo poder encontrar en alguien esa belleza oculta. La energía va mas allá de donde nuestros ojos ven y consiguen conocer lo más profundo… es decir descubren que el interior del otro es una cosa maravillosa. Personalmente quiero a la gente por lo que es y no por lo que miro, más allá de su " Empaque" y por eso recuerdo como son y no cómo los veo. Esa gente que puede ver más allá de las apariencias son los más cercanos y estimados…

...son esas personas que saben que la belleza física no es eterna pero que la interna, la belleza del alma, perdura aún cuando nosotros ya no estemos.

Brindo por todas las personas que descubren, saben y sienten que como dice el principito: "lo esencial es invisible a los ojos".


"Lo externo no es eterno. Así que dejemos al descubierto la verdadera belleza, la del espíritu..."

...Qué no daría yo por contemplarte, aunque fuera un sólo instante...


Cuenta la historia, (ya no se bien la fuente) que iba Jesús y sus discípulos caminando por la calle de una aldea, cuando el primero del grupo, adelantado a los demás, nota la presencia de un perro muerto y con evidentes signos de putrefacción. Ante el horrible espectáculo que significaba para él, ese animal muerto, intentó con ayuda de otros discípulos, ocultar la visión del perro al Maestro, tratando con ello de evitar el “mal rato” de Jesús, enfrentado a tan violenta muestra de fealdad.
De manera evidente, Jesús notó el movimiento y antes que siquiera pudieran ocultar el cadáver del animal, quedó parado frente al perro, a solo unos pocos pasos.
Los apóstoles, atónitos miran a Jesús casi disculpándose por el espectáculo que estaba presenciando, cuando Jesús señala:
“Que linda dentadura tenía este animal…” y sin mostrar ningún atisbo horror, asco o rechazo continúa su camino tan plácido como hasta entonces.”


La caricatura es de Rayma: http://www.rayma.com.ve/

La música de fondo es de "Joaquin Sabina y Jarabe de Palo", cantando una canción que me recuerda a Mariale... La flaca

8/21/2008

Elijo la felicidad...


No recuerdo bien de quien son estas palabras, pero me enseñaron que la felicidad es una elección. Mientras en mi cabeza suena "Aun Vivo" de Franco de vita...


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En primer lugar voy a contarles una pequeña anécdota:

.- Mi médico se ha empeñado en que venga a verlo-le dijo un paciente al psiquiatra.
Sabe Dios por qué. Estoy felizmente casado, tengo un trabajo seguro, un montón de amigos, no tengo ninguna preocupación...
.- Ya - replico el médico, mientras cogía su cuaderno de notas
.- ¿Y, cuanto tiempo lleva así?


Nadie cree en la felicidad. Parece que el hombre no puede ser feliz. Si hablas de tu depresión, de la tristeza, de la infelicidad, todo el mundo se lo cree; pero si hablas de tu felicidad, nadie te cree; parece algo antinatural.
Tras cuarenta años de investigaciones sobre la mente humana, Sigmund Freud, que trabajo con miles de personas y estudió miles de mentes perturbadas, llegó a la conclusión de que la felicidad es algo ficticio, que el ser humano no puede ser feliz.
Como mucho podemos hacer las cosas más agradables, pero nada más. Como mucho podemos disminuir un poco la infelicidad, pero lo que se dice ser feliz, a eso no puede llegar el hombre.
Parece muy pesimista...pero si nos fijamos en la humanidad, esa parece ser la situación; parece que es así. Solo los seres humanos son infelices. Algo va mal en lo profundo.
Lo digo por experiencia propia: los seres humanos pueden ser felices, más felices que las aves, más felices que los árboles, más felices que las estrellas, porque los seres humanos tenemos algo que no tiene ninguna ave, ningún árbol, ninguna estrella. Tenemos conciencia.
Pero al tener conciencia existen dos alternativas: Llegar a la felicidad o a la infelicidad. Tú eliges. Los árboles son felices porque no pueden ser infelices. Su felicidad no es una cuestión de libertad; tienen que ser felices. No saben ser infelices, no tienen otra posibilidad. Los pájaros que trinan en los árboles, no son felices por decisión propia; sencillamente son felices porque no conocen otra cosa. Su felicidad es inconsciente, natural.
Los humanos pueden ser tremendamente felices y tremendamente infelices, y son libres de elegir. Esa libertad es peligrosa, esa libertad es arriesgada, porque tú eres el único responsable. Algo ha ocurrido con esa libertad, algo ha ido mal. El ser humano parece andar cabeza abajo.
La gente va en busca de la meditación. Necesitas la meditación únicamente porque no has elegido ser feliz. La meditación es una medicina; si estás enfermo, necesitas una medicina. En cuanto te decides por la felicidad, en cuanto decides que vas hacer feliz, no te hace falta la meditación. Entonces la meditación empieza a surgir por si misma.
Si hay tantas religiones es porque hay muchas personas infelices. Una persona feliz, no necesita ninguna religión; una persona feliz no necesita templos, ni iglesias, porque para una persona feliz, el Universo entero es su templo, la existencia entera es una iglesia. La persona feliz no se dedica a la religión porque su vida entera es religiosa. Cuando el trabajo se hace con felicidad es una oración: Su trabajo se transforma en culto, tu respiración misma es una maravilla, es una gracia.
La felicidad se da cuando encajas en tu vida, cuando encajas tan armoniosamente que hagas lo que hagas te proporciona alegría. Entonces te das cuenta de que la meditación va detrás de ti. Si amas el trabajo que haces, si amas tu modo de vida, eres una persona de meditación. Entonces nada te distrae. Cuando las cosas te distraen, eso simplemente demuestra que en realidad no te interesan esas cosas.
El maestro no para de decir a los niños. ¡Préstenme atención! ¡Estén atentos!. Los niños prestan atención, pero su atención se centra en otra cosa. Hay un pájaro cantando a todo cantar junto al edificio del colegio, y el niño esta atento al pájaro. No se puede decir que no este atento, que no sea meditativo, que no esté profundamente concentrado... ¡Claro que si! Aún más: se ha olvidado por completo del maestro y del problema de aritmética que este escribe en la pizarra. El niño está totalmente ajeno a eso. Completamente poseído por el pájaro y su canto. Pero el maestro dice: ¡Préstenme atención!.. ¿Qué haces? ¡No te distraigas!..En realidad es el maestro quién está distrayendo al niño. El niño presta atención de una forma natural. Es feliz escuchando el canto del pájaro. El niño está prestando atención. Si el pájaro lo atrae más, que puede hacer? El maestro no lo atraía tanto, la aritmética no tenia tanto encanto…
No se nos pone en la tierra para ser matemáticos. Hay unos cuantos niños a los que no les interesará el pájaro; ya pueden aumentar el volumen de su canto que ellos seguirán prestando atención a la pizarra. La aritmética es para ellos. Tienen una meditación natural, cuando se trata de las matemáticas.
Nos han hecho distraernos con preocupaciones nada naturales: el dinero, el prestigio, el poder. Escuchar los pájaros no te proporcionará dinero, ni prestigio ni poder. Contemplar una mariposa, no te va a ayudar ni económica, ni política ni socialmente. Esas cosas no son lucrativas, pero esas cosas te hacen feliz.
Un verdadero ser humano obtiene el valor de las cosas que le hacen feliz. Dice: "He elegido mi camino, he elegido los pájaros, las mariposas y las flores. No puedo ser rico pero no importa. Soy rico porque soy feliz". Pero los seres humanos se han vuelto locos.

He leído una cosa:

El viejo Ted llevaba varias horas sentado a la orilla del río sin que picaran los peces. Entre las botellas de cerveza y el calor del sol se quedo dormido, así que no estaba en condiciones cuando un pez mordió el anzuelo, tiro del sedal y lo despertó. Ted perdió el equilibrio y se cayó al río. Un niño había observado atentamente lo que pasaba. Mientras el hombre se debatía intentando salir del agua. Le pregunto a su padre. Papá, ¿ese hombre está pescando un pez, o el pez está pescando al hombre?.

El pez te está atrapando y arrastrándote; tu no estás atrapando al pez. En cuanto vez dinero, dejas de ser tú mismo. En cuanto vez poder, prestigio, respetabilidad, dejas de ser tu mismo. Te olvidas inmediatamente de todo, te olvidas de los valores intrínsecos de tu vida, tu felicidad, tu alegría, tu gozo. Siempre eliges algo del exterior y lo intercambias por algo del interior. Gana lo exterior y pierde lo interior. Pero, ¿qué vas a hacer?. Incluso si tienes el mundo entero a tus pies pero te has perdido a ti mismo, incluso si has conquistado todas las riquezas del mundo y has perdido tu tesoro interior. ¿Qué vas hacer con todas tus riquezas? Esa es la infelicidad.

8/10/2008

Cerrando circulos....


Este ha sido un fin de semana muy duro para mi, mucho trabajo... tenia esperanzas de verme con alguien pero no resulto... quizá en otra oportunidad...

...seria por eso que recordé este escrito del Brasilero Paulo Coelho:

Siempre es preciso saber cuándo se acaba una etapa de la vida. Si insistes en permanecer en ella más allá del tiempo necesario, pierdes la alegría y el sentido del resto. Cerrando círculos, o cerrando puertas o cerrando capítulos. Lo importante es poder cerrarlos y dejar ir momentos de la vida que se van terminando.
¿Terminó tu trabajo?

¿Se acabó tu relación?

¿Ya no vives más en esa casa?

¿Debes irte de viaje?...

Puedes pasarte mucho tiempo de tu presente "revolcándote" en los porqués, en repetir el cassette y tratar de entender por qué sucedió tal o cual cosa.

El desgaste va a ser infinito, porque en la vida, tú, yo, tu amigo, tus hijos, tus hermanos, todos estamos encaminados hacia ir cerrando capítulos, ir dando vuelta a la hoja, a terminar con etapas, o con momentos de la vida y a seguir adelante.
No podemos estar en el presente añorando el pasado. Ni siquiera preguntándonos por qué?. Lo que sucedió, sucedió, y hay que soltarlo, hay que desprenderse. No podemos ser niños eternos, ni adolescentes tardíos, ni empleados de empresas que ya no existen, ni tener vínculos con quien no quiere estar vinculado a nosotros.
¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir!
Por eso, a veces es tan importante destruir recuerdos, regalar presentes, cambiar de casa, romper papeles, tirar documentos, y vender o regalar libros.
Los cambios externos pueden simbolizar procesos interiores de superación. Dejar ir, soltar, desprenderse. En la vida nadie juega con las cartas marcadas, y hay que aprender a perder y a ganar. Hay que dejar ir, hay que dar vuelta a la hoja, hay que vivir sólo lo que tenemos en el presente.
El pasado ya pasó. No esperes que te lo devuelvan, no esperes que te reconozcan, no esperes que alguna vez se den cuenta de quién eres tú. Suelta el resentimiento. El repetir "tu película personal" para darle y darle al asunto, lo único que consigues es dañarte mentalmente, envenenarte, y amargarte.
La vida está para adelante, nunca para atrás. Si andas por la vida dejando "puertas abiertas", por si acaso, nunca podrás desprenderte ni vivir lo de hoy con satisfacción. ¿Noviazgos o amistades que no dejas ir?, ¿Posibilidades de regresar? (¿a qué?), ¿Necesidad de aclaraciones?, ¿Palabras que no se dijeron?, ¿Silencios que lo invadieron?
Si puedes enfrentarlos ya y ahora, hazlo, si no, déjalos ir, cierra capítulos. Dite a ti mismo que no, que no vuelven. Pero no por orgullo ni soberbia, sino, porque tú ya no encajas allí en ese lugar, en ese corazón, en esa habitación, en esa casa, en esa oficina, en ese oficio.

Tú ya no eres el mismo que fuiste hace dos días, hace tres meses, hace un año. Por lo tanto, no hay nada a qué volver. Cierra la puerta, da vuelta a la hoja, cierra el círculo. Ni tú serás el mismo, ni el entorno al que regresas será igual, porque en la vida nada se queda quieto, nada es estático. Por salud mental, por amor ti mismo, desprende lo que ya no está en tu vida.

Recuerda que nada ni nadie es indispensable. Ni una persona, ni un lugar, ni un trabajo. Nada es vital para vivir porque cuando tú viniste a este mundo, llegaste solo.

Por lo tanto, es costumbre vivir contigo mismo, y es un trabajo personal aprender a vivir solo, sin la compañía humana o física que hoy te duele dejar ir.
Es un proceso de aprender a desprenderse y, humanamente se puede lograr, porque recuerda nada ni nadie nos es indispensable. Sólo es costumbre, apego, necesidad. Pero cierra, clausura, limpia, tira, oxigena, despréndete, sacúdete, suéltate.
Hay muchas palabras que significan salud mental y cualquiera que escojas te ayudará a seguir adelante con tranquilidad.
¡Esa es la vida!